Nuestra historia, la de nuestra agrupación, va de Largo Caballero hasta Felipe González, casi nada. Digo esto porque fueron el primer nombre y el último que ha tenido la Casa del Pueblo de Miraflores.

Aunque yo viví el nacimiento de esta sede, la actual, muy directamente, mi edad no me permite recordar la historia completa de la agrupación – que es bastante interesante y, por qué no, muy hermosa – así que recurrí a la memoria de los históricos que lo vivieron, de los que me suelo rodear muy a menudo, a los que estaría escuchando eternamente y a los que admiro por el brillo que hay aún en sus ojos cuando recuerdan aquellos tiempos.
Nuestra Casa del Pueblo nace en 1977, en la calle La María, fue la primera de Sevilla, casi al mismo tiempo que las de Nervión y Triana. Agrupaba toda la zona situada al norte de la escuadra formada por la Ronda y la Carretera de Carmona, también incluía el Parque Alcosa. En la primera asamblea local, se acuerda la adopción del nombre: Agrupación Socialista Francisco Largo Caballero.
El día a día transcurría entre actos, charlas, debates… y se abrió a los barrios, fue el cine para niñ@s la actividad más exitosa.
Nuestra agrupación tuvo el honor de acoger la primera reunión celebrada por parlamentarios, después de su toma de posesión.
Se propiciaban reuniones informales con miembros de otras agrupaciones. De una de estas reuniones con militantes de Triana, como Paco Arcas, con Umbrado de Nervión y Baldomero Morillo de Centro, nació la iniciativa de, a través del Federal, solicitar el regreso a España de los restos de Largo Caballero que tuvo lugar en 1978.
Pasaron por esta Casa del Pueblo compañeros tan relevantes como Felipe González, Alfonso Guerra, Gómez Llorente, Múgica, Txiki Benegas, Pablo Castellano, Barón y Nicolás Redondo entre otros, y como no podía ser de otra manera, todos dejaron constancia de ello con sus firmas en las tinajas de la Bodeguita de Jaime –situada en la esquina de la calle Algámitas con la calle Llerena, en el barrio de Pio XII- donde se acostumbraba a cerrar las reuniones.
Fueron protagonistas, y también culpables, de que hoy sigamos aquí, en la lucha, los compañer@s a los que quiero poner nombres y apellidos:
– Juan José Oleaga, “alma mater” del parto de esta agrupación y primer Secretario de Organización de la misma (entonces, en las agrupaciones, no existía la Secretaria General).
– José María Izquierdo, compañero que se escapo de un pelotón de fusilamiento y cruzo, junto a Umbrado, España andando hasta llegar a Francia.
– José González Asensio, discípulo en su juventud de Martínez Barrios e impulsor junto a Julio Blanco ( Secretario General de Centro) de Las Noches del Baratillo y al cual tuve el honor de escucharle algún poema.
– Enrique Martínez, que fue el primer encargado de la formación y asesoramiento sindical en la Agrupación.
– Manuel Serrano, Manoliyo, extraordinaria persona, sencillo. Era el más conocido por los niños y niñas del barrio, ya que era el encargado de las películas y de informar de las proyecciones que se realizaban los sábados, junto con Ángel Gordillo, encargado de las proyecciones. La maquina y el material necesario era facilitado por Adolfo Guerra.
-Manolo Rodríguez (apaleado en Castilblanco por una banda de fascistas), Pestaña, Manolo Bonmatti, Ricardo Cabrera, Octavio, Paco Rodríguez, Palomo, Cristóbal, Carmina, Jesús Fernández, José Antonio García , María Rodriguez, Paco Carrión, José Mari Sanz, Manolo Llorente, Paco Núñez, Mayorga, el Peque, Pepe Bueno, Miguel Sáenz, Pepe Valle, Nines,… tanta fuerza, tanto corazón.
– Alfonso Rodeño, con una destacada labor sindical en Sevillana. En campaña, cogía su coche, lo llenaba de carteles y el cubo con la cola y se iba toda la noche, el solo, a pegar carteles por toda Sevilla.
– Fernando Lappi, que junto a José Ramón, fueron machacados en un ataque de Fuerza Nueva durante una pegada de carteles en el Cerezo. Militante que realizo una destacada labor en la UGT y en el Regional y que, desgraciadamente, falleció en plena juventud, y probablemente algo tendría que ver aquella paliza.
– Antonio Raya, que desempeñó la Secretaria General Provincial de la Construcción y que tras en el 23- F cogió las fichas de los compañeros y compañeras y cruzó la frontera de Portugal. Me cuentan que una vez allí llamó a un compañero para decirle: ¡¿Y ahora qué hago?! Había que salvar a los nuestros de lo que pudiera pasar y no se lo pensó, eso tiene un nombre, valor.
Muchos ya no se encuentran entre nosotros, pero nunca desaparecerán mientras estén en nuestro recuerdo.
Después del lanzamiento de un coctel Molotov, que destruyó totalmente el local de la agrupación, comenzó la diáspora por otros locales de la zona. Se segregaron Alcosa y Pino Montano, originando sus propias Agrupaciones. Manolo Bravo y Manolo Martín fueron Secretarios de Organización durante el periodo en que la agrupación ocupó los locales situados en Santa Catalina (Plaza Poeta Luis Cernuda) y en Virgen de Gracia (Barriada Santa María de Ordás).
Y tras esta andadura, rumbo a la Macarena en calle Monederos, donde se produjo la división que dio origen a nuestra agrupación, la agrupación Miraflores, que se instaló, primero en Los Carteros (¡qué buena mesa de camilla teníamos!) y luego en la barriada de Los Príncipes, donde hoy día tras día seguimos los pasos de compañeros y compañeras que siempre supieron que lo importante era estar ahí, con el barrio, con la gente, en los buenos momentos pero sobretodo en los malos, y seguro que en aquellos años no estaban mejor que ahora, pero ahí estaban, en lo importante, en el socialismo de verdad.
De aquellos años, hace ya 34, 35 ó 36, en los que se comenzó a gestar la Agrupación “Largo Caballero” continúan con nosotr@s compañeros y compañeras que vivieron todo aquello y que me han ayudado para poder contaros esta historia ( que admite ser ampliada, modificada, matizada, por aquell@s que tengan recuerdos y nos los quieran contar). Compañeros y compañeras que siguen creyendo que, como dijo Benito Pérez Galdós:
¡Es por el socialismo por donde llega la aurora!

Eva Patricia Bueno Campanario
Secretaria General