“Sólo podemos evitar la inminente catástrofe si los líderes escuchan a sus seguidores”, esta aseveración de Arthur M. Schlesinger fue una de las muchas que destacó el compañero José Rodríguez de la Borbolla durante la conferencia que dio ayer tarde en nuestra agrupación sobre el “Liderazgo político y social”.

Pepe de la Borbolla utilizó frases de ilustres pensadores y políticos para ilustrar su acercamiento a la descripción de un líder, a la vez que fue comentando momentos de su trayectoria vital que también sirvieron para entender su concepto de liderazgo.
Resaltó que: «el líder no puede ser un marmolillo ni un bailarín» y recordó la frase que le había oído a una compañera socialista de Málaga: “si no los miras corres el riesgo de no verlos” para explicar que el líder debe estar permanentemente atento a lo que sucede a su alrededor y trabajar para los demás. Por ello lo más importante de un líder es su compromiso de acción, actuar uno mismo y convocar para que actúen los demás. Debe ser un instrumento de cohesión, para que todos trabajen y vayan juntos.
Su objetivo debe ser un proyecto colectivo en el que todos deben creer y compartir, en el que su liderazgo se base en la dirección,la orientación y la influencia y no en el mando. Y para que esto funcione tiene que generar confianza entre la gente que a su vez tiene que tener expectativas, tiene que saber a dónde va y que con los otros no sabe a dónde le llevan.
En otro momento de la charla, Rodriguez de la Borbolla comentó la frase de Winston Churchill: “el problema de nuestra época es que los hombres no quieren ser útiles, sino importantes”para insistir en la necesidad de que el líder debe estar convencido de que su papel en la sociedad es el de hacer o promover mejoras para los demás, debe ser fuente de soluciones finales. Después de escuchar, valorar e informarse tiene que proponer soluciones que al aplicarlas hagan el menor daño. “Esta es una de las diferencias entre la izquierda y la derecha, mientras la primera busca las soluciones menos dañosas, la segunda lo único que busca es que la solución funcione aunque provoque daños importantes”.
Comentó además que el líder debe saber controlar el tiempo y poner las soluciones al servicio de las ideas, pero siempre dentro de la cultura de la organización, sin romper las reglas del juego.
Concluyó diciendo que los verbos del líder son el ser y el hacer.

Después de su intervención se dio paso a los comentarios de los asistentes entre los que se encontraba el compañero Pepe Romero, ponente de la anterior sesión. Su aportación junto a las que hicieron otros compañeros enriquecieron la charla que por el interés suscitado se alargó hasta muy entrada la noche.