Antonio Muñoz

En un derroche de optimismo sin precedentes Rajoy ha declarado que la crisis en nuestro país era cosa del pasado. Una pasada de frenada la protagonizada por el Presidente .Un resbalón en toda regla desde Tarifa a Finisterre.

Hay quien ha escrito que tras ello se escuchó una gran pedorreta en los cuatro puntos cardinales de nuestro país. Los protagonistas de esos sonidos singulares eran las más de 600.000 familias que no perciben ni un solo euro y están en una situación de absoluta pobreza.

Si a esa particular sinfonía se hubieran sumado los cerca de cinco millones de parados se habría producido algo parecido a un “Big Bang Ibérico”.

No negaremos la existencia de algunos indicadores positivos. Pero con millones de desempleados, un crédito bancario que no fluye, unas administraciones públicas prácticamente paralizadas, unas empresas languideciendo, hay que tener jeta para decir tal frivolidad. El panorama no está para tomarle el pelo a la gente.

Rajoy terminó rectificando y matizó su exagerado optimismo después de una manta de palos y críticas. La penitencia la realizó en una cena ante 900 comensales del PP en Madrid.

Recuerdo que Güemes un ex alto cargo del PP se despachó a gusto contra Zapatero cuando este vaticino brotes verdes en nuestra economía, le dijo que estos debían de ser de marihuana y que se los habría fumado el propio ZP.

¿Qué habrá dicho el tal Güemes? Seguramente nada. Pero quizás haya pensado que Rajoy ingirió un exceso de queimada mezclada con algún alucinógeno y un poquito de tonopan.

Artículo publicado en El Correo de Andalucía el 22 de diciembre de 2014

Enlace a al artíulo

http://blogs.elcorreoweb.es/antoniomunoz/2014/12/22/