Mar Martín

El aleteo de una mariposa en Sevilla puede producir una tormenta en Japón, defiende la teoría del caos y si esto es más o menos discutible, lo que no tiene discusión alguna es que la papeleta de voto de un ciudadano/a español puede provocar una agitación en Europa.
Más allá de que es “el futuro el que está en juego”, lo cierto, es que es el presente el que se evalúa en esta reválida. Las políticas de austeridad que el Gobierno de Rajoy ha impuesto en estos años, han sido dictadas por la troika, es decir la Comisión Europea; el Banco Centro Europeo y el Fondo Monetario Internacional donde los más retrógrados políticos de derecha han campado a sus anchas.
Los recortes y la destrucción del Estado Social de Bienestar en el que la sanidad y la educación pública eran sus máximos exponentes han sido bombardeados hasta sus cimientos convirtiéndolos en un negocio a tiro de la iniciativa privada, ante la mirada impasible de una Europa de derecha que se frotaba las manos ante tan suculento pastel.
La Reforma Laboral de Rajoy que ha provocado una tasa de desempleo del 26% ha sido elogiada por los prebostes europeos, pero no conforme, insisten en que hay que profundizar en ella, será que los beneficios que ha supuesto a las grandes empresas les parecen pocos.
Leyes como la del aborto o la de Seguridad Ciudadana que nos llevará de nuevo al tiempo de las cavernas, no pueden ser aprobadas con el beneplácito de Europa.
La reducción de becas a los estudiantes y la amnistía fiscal aprobada por Rajoy recién llegado al Gobierno, no pueden quedar inmune.
Y la Europa en la que han mandado los especuladores financieros y que ha amordazado a la ciudadanía condenándola a la pobreza y a la desigualdad tiene que cobrarse una alta factura.
El ideal europeo de solidaridad y cohesión que lleva cinco años en el cenicero, debe resurgir de sus propias cenizas y volver a imperar en la Europa que debe nacer después del 25 de mayo.
De lo contrario legitimaremos los recortes, las privatizaciones, las devaluaciones de los salarios, la pobreza y la desigualdad. El Gobierno habrá superado el examen y le habremos dado licencia para continuar haciendo lo único que saben hacer: más pobres a los pobres y más ricos a los ricos.
El aleteo de una papeleta en Sevilla puede provocar una tormenta en Europa.